domingo, 16 de agosto de 2009

El circuito de Oviedo espera a Alonso


Las calles de Oviedo se preparan para convertirse en un circuito urbano de Fórmula 1. Fernando Alonso recorrerá el centro de su ciudad el próximo 5 de septiembre, a las doce del mediodía, con el R-28, el vehículo con el que el piloto compitió la pasada temporada, y para poner a punto el trazado de la exhibición, el Ayuntamiento ha decidido renovar el asfalto de las calles de Uría y Toreno.

Los trabajos de «renovación del firme, reparación de baches y recrecido de arquetas» terminarán, según el concejal responsable de Vías y Mantenimiento, Benjamín Rodríguez Cabañas, «a más tardar, el próximo lunes». A partir de ahí resta pintar la señalización, para que el coche de Alonso «no tenga ningún problema». El presupuesto para estas reparaciones procede del departamento que dirige Cabañas, y las obras de «repaso» de vías se extenderán más allá del recorrido en próximas fechas.

El «Oviedo Road Show» -con el que Alonso cumplirá el sueño de ofrecer una exhibición en su propia casa y antes los miles de seguidores que abarrotarán las calles que conforman el circuito- saldrá desde la confluencia de las calles Santa Cruz, Uría y Fruela, en las proximidades del teatro Campoamor. En esa zona se instalarán los garaxes, los boxes y el personal de la organización, y desde ahí Alonso se dirigirá, por la calle Argüelles, al inicio del recorrido.

El piloto afrontará entonces la calle Uría hasta Toreno, donde girará para subir hasta la avenida de Galicia y continuar hasta la plaza de América, donde iniciará el recorrido de vuelta por el mismo trayecto. En total, Alonso recorrerá 1.800 metros por el centro de Oviedo, en una exhibición organizada por el Equipo Renault Fórmula 1 y en la que la Sociedad Ovetense de Festejos (SOF) invertirá 409.641 euros, según aprobó la Junta de Gobierno de la entidad el pasado viernes 7 de agosto.

Las exigencias de seguridad para este espectáculo son muy parecidas a las necesarias para organizas un Gran Premio. Así, el perímetro del circuito se cerrará con vallas antiavalancha de dos metros y medio de altura, y las protecciones de hormigón, idénticas a las que se utilizan en los circuitos homologados, garantizarán la seguridad de los espectadores. Además, se utilizarán barreras de plástico rellenas de agua para detener el coche en caso de impacto.

Según consejo de los técnicos de Renault, que visitaron la ciudad para dar el visto bueno al circuito, en las horas previas a la exhibición será necesario sellar las tapas de registro de las alcantarillas y las rejillas que haya en el recorrido, como punto final a las obras de asfaltado que se realizan estos días.

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